En audiencia virtual, Camacho emplaza a los jueces a que no dejen comprar la justicia por el gobierno
Compromiso. El gobernador reiteró que en ningún momento tuvo la intención de huir del país, porque tiene un compromiso con el pueblo, con su familia, con Dios y consigo mismo._
*La Paz, 13 de septiembre de 2023*.- Emulando a la “Diosa griega Themis”, el gobernador Luis Fernando Camacho, en su intervención de su audiencia virtual desde el penal de Chonchocoro, -en la que ampliaron por tres meses su detención-, pidió al juez del caso Elmer Laura que la “balanza de la justicia” se incline en el equilibrio e igualdad de condiciones de las partes.
De manera general hizo un llamado y reflexión a las autoridades de justicia a que no hagan lo quiere el partido de gobierno, “apuntando con el dedo”, razón por la cual otros ciudadanos como él están detenidos.
Aprovechó de recordar que su secuestro judicial se debió a un compromiso que hizo el ministro de Gobierno del Castillo con el presidente Luis Arce.
Y reiteró que en ningún momento tuvo la intención de huir del país, porque tiene un compromiso con el pueblo, con su familia con Dios y consigo mismo.
Por lo tanto, aseguró que no abandonará a su pueblo en una lucha que intentaron volcarla con un golpe de Estado, cuando en realidad se trató de un fraude escandaloso.
En ese sentido, con su detención intentaron justificar la actitud de un cobarde ( Evo Morales) que sí huyó sin que nadie se lo pida.
Camacho también se refirió directamente que la justicia, asegurando que está podrida.
Afirmó que la memoria de un pueblo no se puede borrar. “Usted tiene la oportunidad histórica (…) La memoria de un pueblo no la va a borrar un fallo, no la va a borrar un presidente ni un partido político. La memoria de un pueblo la escribimos todos nosotros señor juez”, agregó.
*”Lograron quebrarme de mil maneras”*
Camacho hizo saber que quisieron quebrarlo de mil maneras desde su encarcelamiento en el penal de máxima seguridad de La Paz, pero no lo van a lograr.
La primera autoridad cruceña reiteró que tiene la conciencia tranquila debido a que no ha cometido ni un delito, y que espera el tiempo de Dios para estar libre.