CASACOR Bolivia superó las dificultades, generó trabajos y mostró una cara positiva del país
- La muestra ha sido calificada como exitosa. Fueron 34 días exhibiendo lo último en arquitectura, diseño de interiores y paisajismo.
(Santa Cruz de la Sierra, 28 de junio de 2025) Luego de 34 días de exposición, CASACOR Bolivia cerró sus puertas al público consolidando una vez más su papel como la plataforma más influyente de arquitectura, diseño de interiores y paisajismo del país. Bajo el inspirador concepto “Sembrar sueños”, la vigésimo segunda edición de la muestra transformó una parte del apart-hotel La Quinta, en el barrio Urbarí de Santa Cruz de la Sierra, en un vibrante escenario de creatividad y sostenibilidad.
A lo largo de 3.800 metros cuadrados, 31 espacios fueron intervenidos por 41 profesionales, entre arquitectos, diseñadores y paisajistas de Santa Cruz, La Paz, Beni y Cochabamba. Los 25 mil visitantes recorrieron con entusiasmo los distintos espacios, donde se fusionaron estética, funcionalidad y una marcada conciencia ambiental. Desde salas de estar, cocinas y dormitorios hasta churrasqueras, lofts y jardines, cada propuesta fue concebida como una experiencia sensorial e inmersiva.
A pesar de los desafíos logísticos —como la escasez de dólares para importaciones o la falta de combustible que dificultó el traslado de materiales—, los directores “Quito” Velasco y Graciela Anglarill celebran los resultados obtenidos. “Estamos felices por lo conseguido. Tuvimos muchos contratiempos, pero logramos superarlos con el compromiso de nuestros aliados y el talento de los participantes”, expresó Velasco.
Además de su aporte estético y cultural, CASACOR Bolivia reafirmó su impacto económico y social. “Cada ambiente movilizó cuadrillas completas de obreros: albañiles, carpinteros, electricistas, plomeros, entre otros. Hemos visto a alrededor de 1.500 personas turnándose para trabajar en la instalación de la muestra, lo que demuestra que su ejecución dinamiza la industria local y también la de otras ciudades”, destacó el director.
Este año, la propuesta fue enriquecida con espacios dedicados al arte, la gastronomía y el comercio. Dos espacios fueron habilitados para acoger obras de 30 artistas plásticos y escultores, mientras que un nuevo sector estuvo reservado para talentos emergentes. En esta edición, la escultora Rosario Arzabe fue la protagonista, con una colección inspirada en leyendas y personajes tradicionales de Santa Cruz, como homenaje al Bicentenario cruceño.
Para Velasco, el talento boliviano sigue siendo el alma de CASACOR. “Siempre nos hemos sentido orgullosos del potencial que tenemos. Cada año, hay propuestas que nos sorprenden y eso es un gran aliciente para seguir creciendo y mostrando al mundo lo positivo de nuestro país”, dijo. “Por otro lado, están las empresas patrocinadoras: somos su gran vitrina y el nexo con los profesionales que requieren de sus productos. Aquí se vieron cosas que ni siquiera están en el mercado brasileño”.
Y es que la innovación es también una característica de “la casa”. Este año hubo el lanzamiento de una piscina-laguna, que, mediante un sistema de filtrado y arena especial, logra aguas cristalinas. También se tuvo piezas de sanitario creadas con polvo de zafiro, verdaderas joyas para el cuarto de baño. Se vio también una cocina a inducción, en la que se puede programar el peso de los ingredientes, la temperatura y el tiempo de cocción; de esa forma la comida podría estar lista automáticamente.
CASACOR Bolivia 2025 contó con el patrocinio de Coral, Gladymar, Roca y Tramontina, y con el apoyo local de Tumpar. Mazda fue el vehículo oficial; Los Tajibos, el hotel oficial; y Eurochronos, la tienda oficial. También participaron Cemento Camba, Agimex, Century by Dekorato, Living Room, Sweet Home y Vasa como marcas de merchandising. Entre los proveedores oficiales estuvieron AVM Services, D’Etiqueta Rental y Quito Velasco.