Cerveza, fuente de vitaminas y minerales
La cerveza, una bebida alcohólica que es considerada como alimento, todo depende del uso que se le quiera dar.
Debido a su contenido de alcohol diluido, debe tomarse con moderación. Los grados de alcohol de la cerveza están en torno a los 4-5º dependiendo del tipo y de su fermentación. Pues, las hay de una sola fermentación de 2 fermentaciones, e incluso de 3, aumentando cada proceso un poco más el contenido en alcohol de la bebida.
El grado alcohólico de cada cerveza quiere decir que, por cada litro de cerveza que se ingiere, aproximadamente dicha cantidad expresada en centilitros son de alcohol, siendo este componente el más pernicioso para la salud de los muchos que contiene.
Sin embargo, no sólo existe esta visión de la cerveza por su contenido alcohólico, sino que también este oro líquido se considera como un alimento, debido a sus múltiples nutrientes y propiedades.
Por ello, atendiendo a su perfil nutricional, la cerveza se encuentra entre los alimentos bajos en grasa ya que, propiamente esta bebida no contiene grasa. Pero, aun así, hay que tener en cuenta que el alcohol es almacenado en nuestro organismo dentro de nuestro depósito adiposo, es decir, de grasa, por lo que el abuso de ella puede conducirnos directamente a un aumento de nuestra grasa corporal.
Además, es importante recordar también que, pese a que su macronutriente principal después del agua son los hidratos de carbono, 100ml de cerveza contienen 0,5 de proteínas, 0,01 mg. de hierro, 8 mg. de calcio, 37 mg. de potasio, 8 mg. de yodo, y 0,01 mg. de zinc, y así comenzaría una larga lista de minerales. Respecto a las vitaminas, la cerveza es rica en todas las vitaminas del complejo B, incluida la vitamina B12, y contiene trazas de vitamina A.
Dichas vitaminas y minerales presentes en la cerveza hacen de ella un alimento recomendado ante enfermedades cardiovasculares por su buena relación con los niveles de colesterol “bueno”, una bebida antioxidante ya que reduce los agentes oxidativos, además de ello es buena para los huesos y para prevenir la osteoporosis gracias a que evita la pérdida de masa ósea, previene enfermedades del sistema nervioso y neurodegenerativas, y se recomienda en casos de anemia y cuadros menopáusicos para aliviar sus síntomas.
Igualmente, la cerveza es una bebida diurética, ya que el 94% de su composición es agua y su concentración de electrolitos es baja, evitando que se produzcan retenciones de líquidos.
La levadura de cerveza destaca por contener todos los aminoácidos esenciales
Son los que el organismo no puede sintetizar por sí mismo, además de ser rica en vitaminas del grupo B, hierro, zinc y cromo. Sin lugar a dudas se convierte en un complemento perfecto para las dietas vegetarianas, además de aquellos casos de anemia, insomnio, embarazo, cuidado de la piel, uñas y cabello o nerviosismo.
También será muy importante para regular el colesterol y el sueño mejorando nuestra circulación sanguínea. Hay que decir que la levadura de cerveza procede de la cerveza durante el proceso de fermentación, pero para que te quedes más tranquilo no contiene nada de alcohol. Se puede decir en resumidas cuentas de que te resultará muy útil para distintas afecciones pero sin provocar efectos secundarios.