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Creemos califica de inmoral sentencia a Jeanine Añez y responsabilizan a Evo de mover influencias y a la justicia de servil

Creemos califica de inmoral sentencia a Jeanine Añez y responsabilizan a Evo de mover influencias y a la justicia de servil, piden renuncia de funcionarios

El diputado José Carlos Gutiérrez acusó a Evo Morales de tratar de borrar la historia del fraude electoral cometido en su gestión para prorrogarse en el poder, con la sentencia a la expresidente Jeanine Añez. «El verdadero delincuente es Evo Morales», señaló el parlamentario.

El diputado José Carlos Gutiérrez acusó a Evo Morales de tratar de borrar la historia del fraude electoral cometido en su gestión para prorrogarse en el poder, con la sentencia a la expresidente Jeanine Añez. «El verdadero delincuente es Evo Morales», señaló el parlamentario.

Pronunciamiento de la Bancada Creemos

Una sentencia inmoral no borra la vergüenza del fraude

La Alianza Política CREEMOS repudia con vehemencia la sentencia dictada por la justicia servil, despótica y corrompida del MAS contra la expresidente constitucional transitoria Jeanine Añez Chávez, porque es la constatación más palpable del intento de ese partido de torcer la historia, borrar la memoria colectiva y desconocer el fraude electoral de 2019, además de ser la prueba de la sed de venganza de Evo Morales, el gestor de ese engaño al pueblo boliviano y al mundo, para salvar sus responsabilidades por el vacío de poder que generó su cobarde renuncia y las docenas de muertos y heridos producto de la convulsión social que ordenó en persona, acciones de las que hay evidencia en abundancia..

Así se concluyó un juicio político e irregular, que constituyó una aberración jurídica. Añez, como Presidente del Estado de Bolivia reconocida en su momento por la mayoría masista en el Poder Legislativo, y sus afines del Órgano Electoral, Poder Judicial y Tribunal Constitucional, ademas de por la mayoría de países democráticos y organismos internacionales, gozaba de todas las prerrogativas para ser juzgada en un juicio de responsabilidades, pero que el MAS le negó sistemáticamente para sustentar su falsa teoría del golpe.

La sentencia de esta justicia cohechada significa un violento retroceso de la democracia en Bolivia. Ahora nada ni nadie puede garantizar el respeto a los derechos humanos, al debido proceso y a las libertades civiles mínimas en el país. Hoy esta gestión autocrática y totalitaria de Luis Arce Catacora está mostrando su verdadero rostro dictatorial y cínico.

Esta vez el ensañamiento se produce contra la mujer que tomó las riendas del país en un momento álgido de su historia reciente, pero estamos seguros de que ahora la persecución judicial arreciará contra otros líderes de la oposición. La bajeza y falta de escrúpulos del MAS y sus satélites como la Fiscalía General del Estado, la Procuraduría, el Órgano Judicial en su totalidad y el Tribunal Supremo Electoral, no permiten vislumbrar ni la más tenue luz de esperanza de que una verdadera justicia sea impartida en el país.

Frente al sometimiento de jueces y fiscales bolivianos, arrodillados frente al poder de turno, sólo queda recurrir a organismos internacionales para restaurar los derechos de la ex mandataria. El mundo no puede y no debe cerrar los ojos frente a tamaña injusticia, y la prueba son las cartas firmadas por expresidentes, personalidades y figuras políticas de diversos países, demandando respeto  los derechos fundamentales de Jeanine Añez.

En tal sentido, Creemos exhorta a la Organización de Naciones Unidas, a la Organización de Estados Americanos, a la Unión Europea, a los gobiernos de países amigos, a la Iglesia Católica y a todo organismo multinacional de defensa de la democracia, la libertad y los derechos humanos, a pronunciarse y condenar esta sentencia inmoral que ensucia y deshonra la reputación democrática de toda la región iberoamericana.

Consumado este juicio de la vergüenza, queda expresar con total firmeza al MAS que todos sus intentos por borrar las pruebas de su fraude, de su cobardía y de su corrupción, no tienen ni tendrán el efecto que esperan. El pueblo cruceño sabe, el pueblo boliviano sabe y el mundo entero sabe que la lucha ciudadana de los 21 días fue la expresión del rechazo de todo un país a un partido y a un presidente tramposos y fraudulentos, y que una sentencia inmoral no borrará nunca la vergüenza del fraude que sobre ellos cae.

¡Que Dios devuelva la democracia a Bolivia!